Creo que todos estamos de acuerdo en que un gobierno de Rajoy es, por definición, más duro e intransigente que uno de Zapatero, de Sánchez, de Iglesias o de Rivera. Como mínimo, es al que más se le va a tachar de insensible, de alejado de los sentimientos y necesidades de las personas, etc.
El Barça ha jugado la final de la Copa del Rey (de fútbol, si no se dice el deporte, siempre es fútbol) en 2009, 2011, 2012, 2014, 2015 y ahora 2016. Hasta aquí, nada que objetar, el formato a doble partido no da mucho espacio para las sorpresas y sumpongo que a los organizadores les gusta que así sea.
Cada año que juega la final el FCB, e insisto en que son 6 de las últimas 8, los seguidores del FCB exhiben un comportamiento intolerable. Para más inri, el objetivo de los seguidores del FCB no es animar a su equipo, sino aprovechar la final para exhibir un comportamiento intolerable; intentando, además, que cada año sea más intolerable que el anterior. Se sienten felices así. No es la victoria de su equipo lo que les hace volver cantando, sino la impunidad que han disfrutado, el haber tensado aún más la cuerda y salir de rositas. El "este año la hemos montado bien gorda". Lo del fútbol, les diré: a los aficionados del FCB, la Copa es como la Copa de Cataluña, uno no se entera mucho si se gana. La liga aún es algo, no se crean que demasiado. Pero la rúa sólo la montan cuando ganan la Copa de Europa. La liga, si se gana, pues es un buen año, un año correcto, se ha cumplido. La Copa es nada sin liga o Europa, ganar sólo la Copa es echar al entrenador por paquete.
La cosa es así hasta el punto de que los seguidores del FCB quieren que su equipo juegue la final por el chou que montan, y que les eliminen a tiempo es una decepción porque les priva de la ocasión, no por no poder ganarla. Créanme, vivo en Barcelona, me muevo en ambientes del FCB, y sé de lo que hablo.
Zapatero, todos lo sabemos, era un babao. El pollo de las finales del 2009 y 2001 estaba chupado porque ZP es guay. Pero hemos tenido más con Rajoy. Y el pollo ha sido cada vez mayor, visto que Rajoy se comporta como una estatua de piedra. Intransigente y pétreo en sus convicciones, puede. Pero es tan activo como una estatua. Así que una vez que te das cuenta de que no se moverá hagas lo que hagas, barra libre.
Por esto digo que la final de la Copa es un síntoma del gobierno que tenemos (y supongo que, por extensión, de la sociedad en la que convivimos). Creo que con gran dolor de corazón todos los españoles (bueno, 45 millones de 46) tenemos claro que a la primera pitada al himno o a la entrada del Rey la final se ha de suspender y se juega a puerta cerrada. Que a la segunda suspensión repitiendo finalista (o tercera, si se me ponen quisquillosos) se debería atribuir sin duda posible toda la culpa al equipo reincidente, y expulsar a ese equipo 5 años de la competición, la segunda expulsión por 10 años, la tercera por 50 y la cuarta a perpetuidad. Pero yendo en serio, nada de que se pueda recurrir hasta Estrasburgo o La Haya. Y quizá no con la primera suspensión de la final, pero seguro que con la primera expulsión, la que demuestre que pocas bromas, se acaba el problema de por vida, que ni el FCB animaría a esos seguidores ni los aficionados del FCB tolerarían a los seguidores. Que no se lo he dicho, pero en esto ocurre como con ETA y el País Vasco: todo el mundo conoce a los seguidores, casi todos tienen un cuñado o un primo seguidor, y éstos viven gracias a la tolerancia (papanatismo) y el mirar para otro lado de todos los que estamos por aquí.
Pero ¡quiá! Incluso teniendo abrumadora mayoría absoluta en el Congreso, el gobierno de Rajoy no se ha atrevido a hacer nada que no les haga parecer guays como ZP, no vaya a ser que... no sé a qué tienen miedo, pero a algo. Ustedes me dirán que el Gobierno no tiene competencias sobre la Copa del Rey y todo eso, pero ¡por favor! Saben perfectamente que se dan los mensajes adecuados, y fin de la historia.
Y si el gobierno es un incapaz en algo tan poco importante como un torneo de fútbol, ¡qué no hemos de esperar cuando sea una situación complicada o trascendente! Y hablo de Rajoy como paladín de las personas de orden y principios, si el gobierno fuera de Sánchez o de Iglesias ya se imaginan.
6 veces en ocho años, y seguiremos sumando. ¿Cuańdo saldrá de entre nosotros un Cicerón que diga
¿Hasta cuándo, Catilina, abusarás de nuestra paciencia? ¿Hasta cuándo esta locura tuya seguirá riéndose de nosotros? ¿Cuándo acabará esta desenfrenada audacia tuya?
He de decir que Cicerón no se limitó a los discursos en el senado, sino que se puso al frente (era cónsul), dirigió las acciones que acabaron con la conjura , y luego consiguió que cayera sobre ellos todo el peso de la ley, sin atenuantes ni eximientes.
Pero no, no tenemos cicerones por aquí. Hace tiempo que no.
Así que vayámonos acostumbrando al espectáculo de las pitadas. O hagan como yo y no vean la televisión.
Rimsky-Korsakov - El vuelo del moscardón