lunes, 30 de junio de 2014

Calcular estructuras: ciencia y charlatanería



Siempre que reflexiono sobre la profesión que ejerzo llego a la conclusión de que o los demás saben mucho más que yo o este oficio se está perdiendo. Estoy convencido de que los calculistas que nos precedieron sabían lo que hacían, y calculaban aplicando su ciencia y, cuando su ciencia no abarcaba algo en concreto, su intuición. Ahora, en cambio, creo que cada vez entendemos menos, tenemos menos ciencia, y en consecuencia cada vez tenemos menos intuición de lo que hay que hacer. Al menos, en mi caso.

A ver si me explico con un ejemplo reciente.

Calculo una nave industrial de estructura metálica. Dentro de la nave industrial hay una entreplanta. Por muchas razones, el cálculo lo hago mediante un programa informático comercial; quiero decir, no la calculo a mano ni mediante un programa de confección propia.

Bien. El programa en cuestión, como casi todos los de su calaña, permite calcular las uniones entre elementos. En el caso a colación, la placa base del pilar sobre el cimiento.

Sigo. Modelizo la placa. El programa, por supuesto, sabe qué acciones actúan sobre la base... y me dice que es errónea.

No pasa nada, ha sido un primer intento. Consulto los resultados del programa, para saber qué fallo hay y haecr la corrección más conveniente, y lo que me encuentro es esto (omito el resto de información, irrelevante para lo que miro):


Es decir: la base, frente al esfuerzo axil, trabaja al 37% de su capacidad. Frente al momento flector en sentido y, al 48%, y frente al flector en sentido z, al 109%. Y frente a los dos flectores combinados, al 157% de su capacidad.

La base falla. ¡Eh, un momento! La excentricidad existente en el sentido y es de 0 mm. No hay flector apenas (bueno, algo sí, el 46% de 0,29 m·t, 0,14 m·t). Y en el sentido z la excentricidad es de 2 mm.

El pilar, por cierto, está sometido a 270 toneladas. Y para esas 270 toneladas la placa trabaja al 37%.

¿Soy yo o aquí hay algo que rechina?

El programa de cálculo, faltaría más, en los resultados me aporta en cada paso la referencia al Eurocódigo, que es la norma que aplico. Intrigado, busco en el eurocódigo la referencia, y esto es lo que encuentro:
 


La norma no es muy explicativa; comprendo que es para gente que sabe, y esa gente no necesita muchas explicaciones. Yo, lo tengo claro, soy un intruso que no debería ejercer de calculista; pero legalmente puedo ejercer, y ejerzo, y por ello intento entenderla.

La resistencia a axil de una placa se estudia antes; no tiene relación con la flexión; ésta se analiza después. Y lo primero que veo es que la flexión que admite depende de la flexión que se ejerza, pues la excentricidad entre la flexión admisible y el axil admisible ha de ser la de las cargas actuantes. Curioso. Si no hay flexión actuando (excentricidad 0), la placa no tiene capacidad para resistir ninguna flexión. Yo, es que soy muy bruto, porque no lo pillo. Y si por el axil está al 51%, por la misma regla de tres está al 51% en la flexión en cada sentido, y en la flexión combinada está al 102%. Aunque la flexión sea absolutamente despreciable (salvo para un ordenador).

Y en las fórmulas del cuadrito, más o menos lo mismo: cuando la excentricidad de las cargas tiende a 0, el denominador tiende a infinito (digo yo que el ±1 no afecta a la excentricidad sino a la división), y el momento resistente tiende a cero. Y ya puedes reforzar la placa lo que quieras, que de ahí no sales.

Claro, lo que yo digo es que cualquier persona sabe que si casi no hay flexión la placa no falla por flexión. Si el flector es una dina por milímetro, no falla por flexión. Pero eso el ordenador no lo decide, para él hay flexión.

¿Quién falla aquí? ¿La norma, el programa o el usuario? Yo creo que la norma está mal y el programa es estúpido, pero probablemente la norma sea correctísima (la han hecho los tíos que más saben del mundo), y el programa no se equivoca nunca ni olvida nada ni desprecia nada. Soy yo el borrico.

Y aún soy más burro por no asumir mi inutilidad. Porque insisto en que aquí hay algo que está mal.

Y así paso los días, rumiando mi miseria por los portales. Después de un día como éste, es comprensible que escriba en mi blog que los calculistas estamos renunciando a saber calcular estructuras, que creemos a ciegas lo que los ordenadores nos escupen y que, de seguir así, en unos años ninguno de nosotros sabrá realmente.

¿Y entonces? ¿Qué será de nosotros, si nuestra ciencia se habrá reducido a mínimos -mínimos cada vez menores, de eso no hay duda- y habremos perdido nuestra intuición para resolver lo que la ciencia no estudia? Imagino que seremos como los astrólogos, los videntes, los quirománticos y los adivinadores del futuro, que hablaremos y hablaremos, el crédulo cliente creerá que sabemos, y nosotros, atentos a sus reacciones, sabremos decirle lo que él esperará que digamos. Supliremos con charlatanería la ciencia que no tendremos, y cuando estemos a solas le pediremos a nuestro ordenador que nos resuelva el problema. Y lo que diga el ordenador lo defenderemos como la verdad absoluta aunque nos aten a una pira.

Y quien se ría y crea que exagero y que esto no pasará... o no conoce el gremio, o no ha reflexionado, o... ése sí sabe. Mucho más que yo, desde luego.

Por cierto: no se lo digan a nadie, pero la placa la voy a dar por buena y simplemente "olvidaré" su comprobación en la memoria de cálculo. Y seguiré pensando lo que opinio siempre, que al final nosotros sólo seremos operadores de ordenador; ellos serán los verdaderos calculistas.


Wilson Phillips - Good Vibrations (Beach Boys)


jueves, 26 de junio de 2014

Clase del 2014


Parte primera: antes del draft

Esta noche es el draft de la NBA. Escribí hace meses una entrada diciendo que este draft terndría tres nº 1 porque había tíos muy buenos; luego, el curso baloncestístico reveló que un compañero de Randle, Joel Embiid, era, además de pivot, muy muy bueno también. El caso de este Embiid está siendo de traca, porque, por un lado, tenemos la opinión generalizada de que los chavales de este año son muy buenos todos, pero el que tiene verdadera categoría para cimentar una franquicia es Embiid. Un Olajuwoon, vaya. Y el único gran pivot, especie, por cierto, que apenas produce gente.

Pero por el otro lado, tenemos años y años de experiencia. La que dice que a los tíos altísimos se les elige en primer lugar, y la inmensa mayoría resultan un fiasco. Un completo fiasco. Y más aún cuando el tío alto tiene las rodillas de cristal, o los talones, o lo que sea. La mayoría las tiene. ¿Y Embiid? Pues resulta que Cleveland, que elegía de nuevo en primer lugar, le llamó para hacerle una revisión médica, y resulta que el mozo tiene una lesión en un pie. Que requerirá cirugía y unos meses de rehabilitación, pero sobre todo, que siembra dudas sobre la fragilidad del muchacho. Y la confianza es como la porcelana: una vez se rompe, no se recupera. 

Así que nadie confía en el mozo. Pero, por otro lado, el tío es muy alto, muy bueno... Parece ser que se venden copias del historial médico del chico, para los equipos interesados. Están siendo, para los gerentes de los equipos y los agentes, unas horas de locura. Seguro que ya se apuesta en Las Vegas en qué puesto caerá el hasta hace unos días seguro nº 1: parece ser que del 8º no baja. ¿Quién lo comprará? No se sabe. ¿Quién será el idiota que lo compre? diría yo. ¿Mi consejo? Randle. Nadie se arrepentirá de haberle fichado a él y no a otro.

Dicho esto, he de hablarles de mi muchacho favorito, Doug McDermott. Es el que me interesa saber dónde irá a parar.

Probablemente estará entre los 10 primeros. ¿Qué aporta, para ello? Pues que no es un tirador, como los que saldrán entre el 20 y el 40. No, él es un anotador. Existe la convicción generalizada de que este chico va a ser una máquina de meter puntos. Pero suerte tendrá si sale el 8º, lo cual parece una paradoja y de esto quiero hoy hablar.

¿Qué tiene el chico que no arrastra pasiones? Bueno, aparte de que no es negro y de que juega en Creigthon, una universidad sin ningún caché, se le acusa de que no defiende y de que es fácil anotar cuando te enfrentas a panolis de los que pueblan la NCAA.

De hecho, se cree que McDermott sí será All-Stars algún día (lo que prueba la profundidad del draft), pero la opinión es que el tipo es muy bueno para ser un 12º o un 16º del draft. Esto se explica porque el draft es como el mercado, cada uno debe ir con la lista de la compra hecha y saber qué quiere. San Antonio, por ejemplo, elegirá el último. Si busca jugadores franquicia va aviado, debe buscar tipos que sirvan para calentar banquillos (que no quita para que si les caer la oportunidad de un robo tipo Ginóbili la aprovechen). Chicago, por ejemplo, que elegirá en 16º lugar, fliparía si McDermott está libre para entonces. Porque en esos lugares se elige a jugadores que formarán lo que ahora se llama "la segunda unidad", los reservas de toda la vida. Y sus cuentas son que si McDermott se las ha de ver, no con Lebron James, Kevin Durant o Carmelo Anthony, que son los que por puesto le corresponderían, sino con sus reservas, McDermott se los comerá.

Sí, la idea es que McDermott será un gran 6º ó 7º jugador. Saldrá cuando el partido esté atascado, cuando se necesiten otras cosas, y el tío meterá un par de triples que cambiarán el partido y defenderá el fuerte mientras su titular descansa. Èse es el nivel que se le presume, y por eso saldrá en torno al 10º.

Pero quizá alguno piense como yo. Realmente, la lista de aleros que machacarán a McDermott no es tan larga, y es cuestión de un par de años que se reduzca drásticamente: el chaval empieza ahora y no es justo pedirle que se faje con las superestrellas, pero en tres años, bien, sin duda las tornas habrán cambiado. El chico tiene cerebro y si va al equipo adecuado hará la progresión, estoy seguro. Así que, vale, que no sea titular su año de novato, pero no se le ha de juzgar por eso.

Y, desde luego, es cierto que cada noche se enfrentaba a panolis y no a estrellas de la NBA, pero... se enfrentaba a cuatro a la vez. Cada noche, el equipo rival sabía que tenía que cerrarse en McDermott. Y cada noche, McDermott les daba una paliza. En la NBA tendrá compañeros que obligarán a las defensas a abrirse, así que supongo que una cosa compensará la otra.

En cuanto a lo de que no defiende... lo dicen por su comportamiento en los partidos. Pero es que él, precisamente él, tenía la orden de no defender. Cuando juegas en un equipo de medio pelo que depende de tus puntos y de tu ataque, la primera consigna que recibes es que no te la juegues en defensa: cuídate de las personales. Nada de intentar tapones o robos que te puedan pitar falta, ya está el resto del equipo para defender por ti. Y fue lo que hizo el bueno de Doug. Una defensa correcta y... ¡oigan, qué caramba! Si miran el casillero de victorias del equipo, estarán de acuerdo conmigo en que la defensa de McDermott fue, como mínimo, mejor que la del tío que le defendía. De la de los cuatro que le defendían, si me apuran.

Sí, ya sé, hay un porrón de tíos con mejor cartel: negros, atléticos, reboteadores y con brazos muy largos. Tengo curiosidad por saber cuántos de éstos elegirán antes que a mi amigo. Quién sabe, igual dentro de unos años nos reímos por los que le dejaron pasar.


Parte segunda: después del draft

Esta parte la escribiré mañana, cuando ya se haya celebrado el draft. Simplemente, me hace gracia poder comparar mis elucubraciones del "antes" con las del "después", y me dije ¿porqué no?

¡Qué caramba!

Tras el sorteo, todos sabíamos qué número iba a salir. Bien, el draft ha sido y corresponde un primer análisis. 

Como ayer acabé con McDermott, empezaré con McDermott. ¿Qué tal le ha ido? Pues lo eligieron el 11º, Denver, pero - según declaró el chico después- antes de ponerse la gorra ritual de los Nuggets él ya sabía que lo habían traspasado a Chicago. Y es que fue instantáneo: Chicago quería desde hace mucho a Doug, y estaba dispuesto a hacer lo que fuera para tenerlo. Y la oferta a Denver fue de las que no se rechazan: os damos nuestras elecciones 16 y 19 (que en este draft significan jugadores sólidos) y que elegiréis vosotros, y nos quedamos además con Anthony Randolph, que es un contrato penoso que os quitamos de encima, ya veremos nosotros cómo lo largamos. Y, claro, Denver aceptó. Dice la costumbre que. en la noche del draft, todos los jefes de equipo dicen que han obtenido lo que querían, como los políticos las noches de elecciones, pero parece ser que en esta ocasión el de Chicago dijo la verdad. Y el míster, Thibodau, estaba que no cabía en sí (y cuida que es ancho). Por cierto que dice Thibodau que quien crea que McDermott sólo anota es que no sabe ver; y no me cabe duda que en el equipo que mejor defiende y con el defensor del año detrás, McDermott no desentonará.

Ahora bien, hay otro rumor a tener en cuenta. Desde hace semanas se dice, se oye, se comenta, que a Chicago le da igual el draft, que ellos lo que quieren es a Carmelo Anthony. El corolario que se hace es que a Doug lo quieren cambiar por Carmelo. Para quien se quede a Melo será un desastre, porque todos sabemos que ese tío exige el balón para hacer estadísticas y que nunca ganará nada. Pero es que mandar a McDermott, de Iowa y que lo más grande que ha conocido es Omaha (Nebraska) a la Gran Manzana para que ejerza de alero estrella del equipo... ¿qué quieren, matarlo?

Aunque hay quien opina que sí, que ése era el plan de Chicago... salvo que pudieran elegir a McDermott. Veremos, a mí desde luego me gustaría que mi chico se quedara en los Bulls.

Y por lo que atañe al resto, lo mismo de siempre:

a) Primero eligen los equipos que, da igual lo que elijan, no les servirá de nada. Son los equipos que todos, todos los años, están reconstruyendo el equipo. Cavs, Bucks, Sixers,... Han elegido a jugadores buenos porque todos lo son, pero... claro, es que lo que realmente necesitan no se presentaba en este draft: Kareem salió en el de 1969.

b) Luego hay equipos que han elegido a jugadores sorprendentes por lo que han dejado pasar. Supongo que los quieren para cambiarlos por jugadores de otros equipos.

c) Y, como siempre, el que sabe, sabe. Se alaba el acierto de Boston: normal. Se habla de robo descarado lo de San Antonio: elegían los últimos y han elegido a un especialista en tirar y en pasar el balón. Petróleo una vez más. Normal. Los Heat de Riley también elegían de los últimos, y han salido con el base titular del equipo que ha ganado este año la NCAA. ¿En qué pensaban los demás? Y Utah, ¡vaya robo! Esos tíos saben elegir, lástima que sea un mercado tan miserable que nadie quiera jugar allí.

Y luego está lo de los Lakers. Elegían los séptimos, y se han llevado a Julius Randle. ¡A Randle! ¿Qué hacía Randle libre el 7º? Ni idea. Así que, por un lado, los Lakers se han llevado un robo de campeonato. Pero por el otro, los Lakers ¿es que no tienen ni idea? Han empezado la casa por el tejado, porque ¿quién va a surtir de balones a Randle? Lo primero que han de hacer es buscarse un base de calidad, y cuando tengan la base del equipo armada, conseguir los tíos altos. Aunque por otro lado, es más fácil conseguir en traspasos a un buen base, que hay muchos, que a un figura como Randle (y a ese precio). Si el año que viene cazan un superbase, éstos sí reconstruyen de verdad. O quizá ya este año, porque en el puesto 46 han elegido a un base que tenía que haber estado en la primera ronda. ¿Cómo puede ser? Pues porque no tira triples, supongo. Precisamente lo que no les importa a los Lakers. Sí, es el otro robo. Por algo los Lakers nunca están mucho tiempo abajo.


Bueno, así son los drafts. Un porrón de equipos se ha pasado el año perdiendo para luego elegir un buen jugador, y otros equipos se han dedicado a ganar y ahora eligen... buenos jugadores. Aunque, quién sabe, quizás esta noche algún equipo haya puesto las bases para un futuro brillante. 

El tiempo lo dirá.



We Don't Need Another Hero - Tina Turner



jueves, 19 de junio de 2014

Cosas que yo no comprendo (addendum)



El otro día escribí una entrada en la que criticaba el tratamiento poco riguroso que se daba a un problema del cambio climático.

Es posible que alguien piense que lo que yo critico son los problemas del cambio climático y que piense que esos augurados problemas serán finalmente banales, si se presentan.

Y por ello escribo este addendum a la entrada citada. No soy un incrédulo del cambio climático, y no pienso que haya que tomárselo a risa. Al contrario, no entiendo que todavía se sigan escribiendo artículos poco rigurosos y nada más.

Voy a ponerles un ejemplo muy sencillo: la Armada de los Estados Unidos contempla, como escenario factible, que el Ártico se quede sin hielo en el verano de 2016. No en el verano de 2056, sino dentro de dos veranos. Y la Armada de los Estados Unidos se toma estas cosas muy en serio, pues considera que afecta a la seguridad de su país.

Repito. El año que viene no, el siguiente. Puede que entonces el Polo Norte se haya derretido. Y si se equivocan, puede que sea en un par de años más. Antes del próximo Mundial, en cualquier caso.

Y lo siguiente que planteo es: ¿ustedes creen que un Ártico sin hielo no tendrá consecuencias? Y no hablo del nivel del mar, ¡oiga!

No voy a listarles las posibles y terroríficas consecuencias: seguro que en Internet encuentran blogs de gente con mucho más conocimiento y que se los exponen mucho mejor de lo que yo haría. Pero, desde luego, les aviso que la anomalía climatológica que es Europa Occidental, con un clima mucho más suave que el de las regiones equivalentes del resto del planeta (por ejemplo, ¡Noruega es habitable!)... ¿creen que no depende de la Corriente del Golfo y que la masa de agua fría no afectará a la Corriente del Labrador y que ésta no desviará a la Corriente del Golfo de forma que ya no nos llegará, y que eso no cambiará nuestro clima europeo? Por cierto, que el shock no ocurrirá en 2016; vendrá poco a poco, porque el deshielo no es de un día para otro: este 2014 se va a derretir irrevesiblemente una parte importante, el 2015 otra... y esos excesos ya van a tener consecuencias, prolegómenos de lo que vendrá.

Me exaspera, no comprendo como vivimos como si eso fuera a ocurrir en un futuro tan, tan lejano que para qué preocuparse ahora. Como el que el Sol se apague, vaya.

Y cuando en la entrada original decía que no estaba especialmente preocupado por el cambio climático, es porque pienso que tenemos otros problemas más gordos aún, tan gordos que no queremos enfrentarnos a ellos y que los ignoramos a propósito. Pero eso no quita para que empecemos a pagar las consecuencias de nuestro paso por el planeta.

No, sinceramente no comprendo que no nos preocupe seriamente y que apenas haya poco más que cosas como ésta.

Por si acaso, este verano tome usted todas las fotos que pueda. Quién sabe si será el último.




THE SHIRELLES - Will You Still Love Me Tomorrow



lunes, 16 de junio de 2014

22 22 22



Esta mañana, mientras caminaba por la calle, caí en la cuenta de que, si de pronto un reportero o un encuestador me abordara y me preguntara cuál es el número de los bomberos, no sabría responderle con seguridad. 080, 060, 112, no sé, hay varios números, creo que todos valen si pasa algo. No tengo ni idea. 

No siempre fue así.

En mi mocedad, el teléfono de los bomberos en Zaragoza era el 22 22 22. En aquella época no había que añadir el prefijo provincial, y los números de teléfono eran de seis cifras. ¿Se acuerdan ustedes también? El inicio en 22, en Zaragoza, indicaba que era un número del centro de la ciudad, por lo que supongo que era el del cuartel de la calle Pignatelli (cuartel que, ahora que pienso, diría que ya no existe). Pero era el único número, y me imagino que ellos ya se apañarían para acudir desde el punto idóneo. Lo importante es que era el 22 22 22 y lo sabíamos todos desde niños, desde que sabíamos lo que era un teléfono. Nunca llamé y nunca conocí a nadie que llamara, pero da igual: era un número tan fácil que lo sabías en todo momento.

Por cierto, que en aquella época ya había números de 3 dígitos: 091, la policía nacional, y 092, la guardia urbana o policía local. Creo que estos números todavía existen; ya ven, hay cosas que aprendidas de niño se saben para siempre. En cambio, el número de los mossos de escuadra no lo he sabido nunca. 

El 097 era el de la información deportiva, creo recordar.

Y luego estaba mi favorito: el 093. La información horaria. Para quien no haya llamado nunca, salía un contestador que indicaba la hora en un formato "son las xx horas, yy  minutos, zz segundos. Piiiiií. Son las xx horas...". No sé si sigue existiendo, porque obviamente ya no tiene utilidad, pero en aquel mundo era fundamental. Porque los relojes no iban a pilas, iban a cuerda. Cuerda que había que dar por la noche, so pena de que el reloj se parara. Y lo peor es que antes de pararse, mucho antes, simplemente empezaba a ir más despacio, con lo que uno no notaba que el reloj se estaba parando. Y como esto nos pasaba a todos con relativa frecuencia, era corriente que los relojes no dieran la hora buena y que en una reunión de cinco personas, cada uno tuviera una hora diferente. Y, claro, con diferencias de diez minutos cualquiera se aclaraba.

Por eso, la existencia de una fuente oficial que diera la hora verdadera era utilísimo. Tradicionalmente - me atrevería a decir que hasta la llegada de las televisiones privadas-, en TVE treinta segundos antes de los telediarios aparecía un reloj por el que veías que a las tres em punto empezaban las noticias. Pero sobre todo, era el momento en el que todo el mundo comprobaba su reloj.

Pero eso sólo servía a las tres y a las nueve en punto. ¿En cualquier otro momento? El 093, el servicio de Telefónica (entonces CTNE). Y no había otra, ni falta que hacía.

Ahora, ¿sabe lo que le digo? Que si usted también ha llamado al 093, usted es un antiguo.



Margarita se llama mi amor


domingo, 15 de junio de 2014

Cosas que yo no comprendo



El otro día leí un artículo en un suplemento dominical, titulado "Vivir al borde del naufragio" (no he encontrado en la red un enlace mejor, lo siento). El artículo versaba sobre cómo el deshielo de glaciares y casquetes polares, provocado por el cambio climático, iba a repercutir en el aumento del nivel del mar y que ese aumento era un peligro para la Humanidad. Vale que los sumplementos dominicales no son las plataformas adecuadas para tratar asuntos importantes, pero...

El deshielo de glaciares, Groenlandia, Antártida y todo eso... ¡se dicen tantas cosas! Y el problema es que la mayoría de las cosas que se dicen son espectaculares, y al igual que los árboles y el bosque, uno fácilmente se queda sólo en eso, en la espectacularidad.

Por ejemplo, en este caso se dice que el nivel del mar subirá dos metros. Todos nos llevamos las manos a la cabeza, decimos ¡qué barbaridad!, y ya está. No pensamos.

¿Alguno sabe explicar realmente las mareas? En la bahía de Baffin llegan a ser de 16 m de altura, en la bahía de Fundy (también en Canadá) parece ser que incluso de 21 m. Esa misma marea, en alta mar, produce un desnivel de 1 metro. Probablemente usted no sabe explicar con rigor cómo es esto, pero se imaginará una especie de ola gigantesca...

También sabe que la superficie del mar no es lisa: están las olas, que entiende provocadas por el viento y el rozamiento aire-agua. Y sabe que en cada ola hay mini olas que la reproducen, y en las miniolas microolas, en un fractal perpetuo. En un nivel local, sabe que el mar no es una balsa de agua quieta. A nivel planetario, también. Sabe que en Tarifa hay una corriente muy fuerte del Atlántico al Mediterráneo (quizá no sepa que es porque en el Mediterráneo se evapora más agua de la que aportan los ríos y el mar tiende, pues, a vaciarse). Pero siempre piensa usted en los océanos como balsas gigantes de agua.  Es lo que dice el sentido común.

Sin embargo, en los 80 el Geosat, un satélite artificial cartográfico diseñado específicamente para esto, midió que la superficie del agua es como la piel de una patata. Más o menos lisa, pero llena de protuberancias y boños, hasta el punto de que... ¿creería usted que la diferencia en el nivel del mar entre India e Islandia es de 170 m? Piense en la Tierra como una patata, y comprenderá que sí puede ser.

Mapamundi de la topografía de la superficie de los mares
(The official bibliographic citation for this product is: Smith, W., and Sandwell, D., 1997, Measured and Estimated Seafloor Topography, World Data Service for Geophysics, Boulder Research Publication RP-1, poster, 34" X 53)
Por otro lado, está el hecho de que la Tierra no es esférica: los polos están 21 km más cerca del centro de la Tierra que el ecuador. Es decir, están 21 km más bajos. Si hablamos de roca, se entiende, pero hablando de agua choca un poco. De nuevo, choca porque hacemos simplificaciones mentales; en realidad, hay muchos factores que contribuyen a que el agua se mantenga en el ecuador 21 km más alta que la de los polos.

Así que estará de acuerdo en que decir, alegremente, que el deshielo producirá un elevamiento del nivel del mar de 2 m... dejémoslo en que es poco riguroso.

Pero yo les quería hablar del artículo del suplemento. En una idea que, además, cree importante, porque lo resalta en negrita y como texto clave: "Ante el avance del mar, los expertos en cambio climático han pedido a Alemania, Holanda, Francia y España que fortifiquen sus costas".

Cuando leí esa frase, se lo aseguro, no se me ocurrió otra cosa que levantar la vista y exclamar en voz alta: ¡sopla! Las ideas acudían a mi cabeza tumultuosas, una detrás de otra, encadenadas y enmadejadas. Y, simplificando, esto es lo que querría decirles:

1) ¡Menuda melonada! La acción del hombre está alterando el comportamiento natural del planeta y la recomendación es combatirlo con más tratamiento artificial. Luchemos, resistamos, enfrentémonos a las fuerzas planetarias, pongamos puertas al campo. Caray, si yo fuera un experto en cambio climático, mi consejo sería más o menos del tipo: "seres humanos, están ustedes estirando de un hilo muy delgado, deben aflojar. Su comportamiento de explotar y reformar el planeta les va a pasar factura y el nivel del mar va a subir, vayan desplazándose de las costas hacia el interior; y no se preocupen por quedar lejos de la playa, ya se acercará ella sola".

2) La segunda idea es que los periodistas han interpretado mal a los expertos en cambio climático. Dado el historial de cualquier periodista, esta opción nunca debe descartarse. ¿Qué tipo de periodista trabaja en los suplementos dominicales de la prensa española? Hum, me temo que no los más rigurosos. Y la pregunta subsiguiente es: ¿qué tipo de control reciben los artículos que pueblan los dominicales de la prensa española?

3) Pero hay una tercera idea: ¿qué tipo de "experto en cambio climático" se relaciona con los periodistas? No me extrañaría que la idea proclamada haya pasado por diecisiete manos distintas desde las conclusiones de los verdaderos "expertos en cambio climático" hasta la nota de prensa.

4) Por cierto, ¿dónde se dan carnets de "experto en cambio climático"? ¿Hay profesores? ¿Tienen esos expertos un largo historial de actuaciones ¡y éxitos! que les otorguen el calificativo de "expertos"? ¿Son simplemente estudiosos del cambio climático? Porque, en mi opinión, si realmente son éstas las soluciones que aconsejan...

5) Pero sobre todo, lo que más boquiabierto, cariacontecido, anonadado, me deja es: ¿Cómo es que el cambio climático sólo merece un articulito de fotos con texto en el suplemento dominical del periódico? Quiero decir, no se me ocurren muchos problemas mayores: el fin de nuestras fuentes de energia, la escasez de ciertos minerales claves en nuestra cultura, la inversión demográfica y no muchos más. ¿Y no afrontamos los problemas que se nos vienen encima? ¿Acaso es cosa de otros, el hacerlo? ¿Deben ser los "expertos en cambio climático" los que encuentren las soluciones, las cuales además no deberán requerir ninguna colaboración por nuestra parte? ¿Cómo es que nos preocupa mucho más el calor que hará en el Mundial de fútbol de Qatar en 2022, si ni siquiera sabemos cómo llegaremos al 2022? ¿Cómo es que vivimos tan felices, si no somos ignorantes?

Personalmente, no estoy preocupado por el cambio climático. Porque pienso que no lo conseguiremos. Cambiar el clima del planeta, quiero decir. Podemos (y lo estamos haciendo) apuntarnos algunos tantos en el combate, pero, simplemente, carecemos de energía suficiente. Y ése es, en mi opinión, el verdadero problema al que nos enfrentamos, y la verdadera causa de nuestro futuro llanto y rechinar de dientes. Pero es sólo mi opinión, y la reconozco francamente minoritaria. Hoy, el cambio climático es oficialmente el problema número uno al que nos enfrentamos. ¿Y nos enfrentamos así?

¿Creen ustedes que el problema que anuncia la revista lo vamos a detener a tiempo? ¿Creen acaso que el futuro nunca llegará? ¿O es que reciclando los envases de la leche y poco más es suficiente?

Hay cosas que yo no comprendo.




Mike Oldfield - Tubular Bells


martes, 10 de junio de 2014

Miguel Ríos tiene 70 años

El otro día, Miguel Ríos cumplió 70 años. Siempre que me mentan a Mike Rivers me acuerdo de que en 1982 tenía 38 años... ¡Hum!, es una reflexión que tengo que desarrollarles un poco más.

Miguel Ríos, según la historia oficial, inició su carrera musical en 1962, en las famosas matinales del Circo Price, en Madrid. El mozo tenía 18 años. El nivel del rock'n'roll, en España, en aquellos años, era... bueno, el que era. Digamos que no es un sonido que haya resistido muy bien el paso del tiempo ¡Qué caramba, salvo Elvis Presley nada que sonara entonces podría sonar ahora! Y si esto rige para el rock americano, imagínense ustedes el patrio.

Pero Ríos siguió. Y siguió. Y mejoró, ya lo creo que mejoró. Al mismo tiempo, el panorama local no fue especialmente fructífero. Salieron grupos, triunfaron, desaparecieron, pero el nivel general seguía siendo más o menos el mismo. A nivel mundial, en cambio, la música rock tuvo una auténtica explosión de calidad, viviendo entre 1966 y 1985 20 años mágicos. Claro, si ustedes, en aquella época, oían a la vez a Pink Floyd, Mike Oldfield o Bruce Springsteen, por un lado, y a los Desmadre 75, los Mustang y Tequila por el otro, normal que lo local les pareciera un poco patético.

Pero el caso es que Miguel Ríos siguió aguantando y mejorando, y a finales de los 70 ya tenía algunas canciones algo perdurables. Aunque tampoco tenía un éxito para tirar cohetes, no crean. De hecho, en 1982 y viendo que va a cumplir 38 años, decide que lo deja. Que ya vale, que lleva 20 años y que llega un momento en el que hay que saber retirarse: ahí estaban los Roling Stones, un año mayor Jagger, haciendo giras como momias, viviendo de rentas. Y es que, en 1982, no había viejos en ese negocio. Elvis muerto, Berry retirado, los Beatles disueltos... estaba claro que la música era cosa de jóvenes.

Al mismo tiempo, en España había estallado "la movida". Es base de nuestro ordenamiento jurídico que "la movida" fue la repera y lo mejor que le ha pasado al país desde la fundación de Gadir, pero... la verdad, no fue exactamente como se lo han contado. Sí, salieron muchos grupos, se montaron muchos conciertos y todo eso, pero ¿saben? casi todos eran malísimos. Malos de solemnidad. Unos pocos, muy pocos, tenían a gente con talento, pero el talento necesita trabajo y experiencia, y sus años de gloria estaban aún por llegar. Digamos, simplemente, que esos grupos aportaban aire fresco, juventud y lozanía, y que rompieron la barrera del "yo también puedo". Pero, en términos absolutos, eran penosos.

¿Y Miguel Ríos? Lo habíamos dejado en que decide retirarse. Como despedida, monta una "farewell tour" que, además, va a grabar en un doble disco. Eso del doble disco fue un bombazo ya por su mero anuncio. Nadie grababa dobles en directo, apenas había habido un puñado en la historia mundial.  ¿Era posible que un doble en directo fuese español? ¿Tenía caché, tenía repertorio, ese Miguel Ríos? La expectación que generó fue enorme.

La gira se llamaría "Rock and Ríos", y sorprendía ya desde su primera canción: el desde entonces celebérrimo "Bienvenidos":



Cuando vino a Zaragoza, yo no pude ir al concierto, pero lo retransmitió Canal 2 y, por supuesto, me lo grabé en un par de Agfa-90. Aquello fue brutal, irrepetible. De hecho, el éxito fue tan fuera de madre que Ríos reconsideró aquello de retirarse, y empezó a montar giras a lo grande: "Rock de una noche de verano", "Rock en el ruedo", y así. Y ya pasó lo que tenía que pasar, y ya lo tenemos, al hombre, con 70 años y con su dignidad intacta. En fin, se podrían contar muchas anécdotas de la carrera de Rivers, o incluso de la explosión del Rock'n'Ríos y si hacía campaña por el PSOE (recordemos que entonces todavía gobernaba UCD) o si fue el PSOE el que se apropió de la música de Ríos, pero ahora no se trata de eso.

El caso es que... miren el vídeo. España, 1982. Comparen con lo que hacían en la época grupos como Polanski y el ardor o, por citar lo mejor de lo mejor, Radio Futura. Que yo no quiero quitar méritos a los de la movida, pero es que comparados con los buenos de esa época, eran patéticos. Dejaron un puñado de buenas canciones, desde luego, pero los años verdaderos de la movida estaban muy verdes. En aquella época, el rock'n'roll en Epaña era Miguel Ríos. Y si el hombre ha cumplido 70, quiere decir que Bienvenidos tiene ya 32 años... y sigue sonando excelentemente.

Para mí, ésa es la medida de la grandeza en la música.


lunes, 9 de junio de 2014

Todo el mundo odia a Lebron



Todo el mundo ama a Isabel, dice la canción. La aman, no la odian; porque a quien odia todo el mundo es a Lebron. A Lebron James, claro. En los USA los llaman los "hatters", los odiadores. Que básicamente son dos, los hatters de Kobe Bryant y los hatters de Lebron James.

Estos días se están jugando las finales de la NBA; como habría dicho cualquiera desde hace unos años, San Antonio Spurs otra vez contra Miami Heat. Ya he comentado en otras ocasiones que la NBA es la competición con menos suspense del mundo, y en septiembre ya se pueden cantar las finales, las semifinales y lo que quieran. Este año, por supuesto, el acierto ha sido pleno.

El caso es que hace poco se hizo una encuesta, y en 49 de los 50 estados de los EE.UU. quieren que gane San Antonio; sólo en Florida quieren que gane el equipo de Florida.

(https://pbs.twimg.com/media/BpOACj1CAAAL7iS.jpg:large)


¿Porqué esa inquina contra el equipo de Lebron James? ¿O contra Lebron, no sabría decirles? La culpa, claro, es de Lebron. ¿Y qué le ocurre a Lebron? Pues que es muy bueno. No, muy bueno de verdad. Sin contemplaciones. Cualquier equipo en el que juegue Lebron es, actualmente, mejor equipo que cualquier otro. Lo que no significa que el equipo de Lebron (sea el que sea) gane todos los partidos, pero sin duda ganará muchos de ellos. Y en una serie al mejor de siete el equipo de Lebron ganará en cuatro, seguro. Como ocurre desde hace años.

Verán, esto es como si, por lo que fuera, Islas Fidji tuviera un jugador de fútbol tan, tan desequilibrante, que Fidji fuera la máxima favorita para ganar el Mundial de Brasil, y que además probablemente lo va a ganar. ¿Cree usted que Fidji es el mejor equipo del mundo? No, es el equipo que tiene a "ese tío". Sin ese tío, Fidji sería el equipo ridículo que es ahora; pero tienen a ese tío, y por eso son campeones del mundo. ¿Qué pensaría usted? Seguramente, diría que si, que "ese tío" es muy bueno, pero que es demasiado bueno. Que no es justo. Que siendo tan bueno no tiene mérito. Y, desde luego, no le reconocería el mérito de ser campeones al equipo de Fidji, y por extensión tampoco a ese tío.

Y esto, más o menos, es lo que ocurre con Lebron. Es tan, tan bueno... Les aseguro que sí, que es increíblemente bueno. Es tan bueno que se hace odiar. Menudo problema, ¿no?



Loquillo Y Los Trogloditas - Todo El Mundo Ama A Isabel

martes, 3 de junio de 2014

Dos viajes en el tiempo



Al principio de este blog, se me ocurrió hacer un ejercicio imaginativo, sobre cómo serían las cosas de aquí a diez años. Pero diez años es poco. ¿Qué tal cuarenta? No es descabellado que sigamos vivos dentro de cuarenta años, y muchas personas todavía recuerdan cómo eran las cosas hace 40 años, así que...

Imaginemos que aparecemos en 1974, en el salón de nuestra casa de entonces, y vemos a nuestra familia de entonces. Y tenemos que explicarles cómo es la vida ahora. ¿por dónde empezaría?

Mire, los cambios más importantes son los teléfonos, los ordenadores e internet. Sí que ha habido muchos cambios importantes, por supuesto que sí, pero si usted tuviera que explicarles las cosas, comenzaría por los móviles. Les explicaría que ahora todos tenemos nuestra propia línea, algunos incluso más. Que los números fijos ya apenas se usan. Les contaría cómo hace fotografías con los móviles, cómo las ve al instante, y cómo las comparte con todo el universo a través de la world wide web. ¡Madre mía, explicarles la fotografía digital y lo que se hace ahora! Tendría que contarles entonces lo de internet, todos los ordenadores del mundo conectados, compartiendo la información. Los ordenadores, que ésa es otra bien gorda. No es como en 1974, con unas pocas empresas de contabilidad teniendo un macroordenador. Les diría que en cada casa hay, al menos, un ordenador por habitante. Que la panadera, en vez de una caja registradora usa un ordenador y que en que vende una barra, en el obrador (donde también tienen ordenadores) saben que la ha vendido. Les diría que cualquier niño tiene su propio ordenador, ¡y qué ordenador! portátil, conectado sin cables, pantallas de altísima resolución a  todo color, con programas que en 1974 serían inimaginables. ¿Cómo les entra en la cabeza que hay un ordenador en cada hogar, que los niños los manejan como juguetes, que las que entonces sean madres ahora se conectarán, comprarán las entradas para el cine, se descargarán películas piratas o simplemente compartirán recetas por internet? La única opción es explicarles que las películas de ciencia ficción, Espacio 1999 y todas ésas; pero aún sería más difícil de explicarles que con la tecnología actual los ordenadores sacan fotos y graban vídeos, permiten tener teleconferencias, etc., a un coste cero. Porque el teléfono, la conexión a la red, todo eso, no tiene nada que ver. Les hablaría de las fotografías y las cámaras, los televisores, la manera de escuchar la música, cómo quien tiene un teléfono tiene un localizador GPS y cómo uno encuentra su ruta vía teléfono... Les explicaría que ahora, los coches ya vienen con un navegador, con ordenador, con sensores de impacto, con ABS, ESR, airbags, ¡habitáculos indeformables! Sí, su problema sería que le creyeran.

¿Se da cuenta? Si volviera al pasado, sólo 40 años, tendría problemas para que le creyeran. Así que, si tenemos en cuenta que aparentemente las ciencias y la técnica avanzan cada vez más deprisa, ¿qué nos contaría un viajero de dentro de 40 años? ¡Ah, ahí es donde quería yo llegar! Porque echar la vista atrás y enumerar avances que conocemos es muy fácil. Pero lo que les pido es que aventuren qué avances se van a producir.

Lo primero es saber cuál es el sector que va a cambiar absolutamente con respecto a lo que conocemos. 

Y yo creo que van a ser los coches. Los "coches", debería decir.

En primer lugar, gran parte de los problemas de nuestra vida diaria vienen de los coches. El aparcamiento es un problema. El tráfico es un problema. Los accidentes. Ir a cualquier sitio. Producir combustibles en cantidad suficiente. Tratar los gases del escape, los residuos. Fabricar coches, ¡qué caramba!, 1500 kg de acero, caucho y plásticos diversos, que en la mayoría de las ocasiones circulan con un único ocupante. Tenemos coches diseñados para mover una familia numerosa más invitados y equipaje para un mes con total comodidad en pleno Sáhara, y casi todos los km los hacemos de un semáforo a otro con el conductor como único usuario. Esto, es obvio, es un despilfarro socialmente inaceptable, y la técnica lo va a resolver en estos 40 años.

Actualmente, los coches pueden circular solos. O al menos están en el camino. Tienen navegadores, sensores, gestionan directamente la conducción,... no me cabe duda de que en unos años todos los coches emitirán una señal con su posición, recibirán las señales de todos los vehículos que les puedan afectar, tendrán memorizados todos los caminos... ¿qué más falta? Todos, siempre que podemos elegir, elegimos circular por autopistas valladas, donde otros elementos no pueden invadir las calzadas, así que en breve se irán normalizando cada vez más las carreteras cercadas. El vehículo, si sabe el recorrido, sabe cuánto combustible necesita, se autochequea, sabe si está en condiciones de hacerlo. En que la cosa sea viable, estos vehículos van a arrasar. Llegará un momento en el que ya no hará falta tener carnet y estar en posesión de las suficientes capacidades físicas. Y, por supuesto, se podrá "beber" y viajar.

Bien. Llegados a ese punto en el que el vehículo viaja sin conductor, ¿porqué tendrá que ser un vehículo de siete plazas con maletero? Perfectamente podrán ser como las bicicletas, unipersonales. ¿La familia viaja? Cada uno se sube a su trasto, el pater familias direcciona los vehículos de los infantes, se suben, arrancan.... y se bajan en el destino. ¿Y las maletas? ¡En un vehículo maletero! Sin conductor, claro. Alquilado, por ejemplo: al llegar a destino, el vehículo maletero se vuelve a su base.

¿A qué velocidad serán los viajes? Teniendo en cuenta que no habrá factor humano, yo creo que, metidos en carretera, se viajará a 600 km/h; una velocidad correcta, si me preguntan. Cuando se abandona la carretera y se entra en el casco urbano, obviamente los vehículos irán mucho más despacio, pues puede haber imprevistos con los peatones. Pero fuera de ahí...

No creo que se basen en combustibles fósiles. No serán un recurso abundante, no se emplearán en estos transportes. No, serán eléctricos. El reto del hombre es encontrar fuentes de energía que generen electricidad, y -seamos optimistas- se encontrarán: mareomotriz, geotérmica, eólica, lo que sea. Las baterías serán muchísimo más eficientes de lo que lo son ahora, y los coches eléctricos ocuparán poco, pesarán poco - si no va a haber choques ni accidentes, muchas cosas sobran- y en consecuencia gastarán poco.

Así que si los vehículos son unipersonales y requieren poco espacio para la mecánica, es de intuir que serán muy pequeños. Como motos, por ejemplo. Más aún, puede que sean como motos en su estado de circulación (con el viajero cómodamente tumbado casi a ras de suelo, por aquello de la aerodinámica) y que midan 3 metros de largo por 50 cm de ancho, pero que en posición de aparcamiento se plieguen hacia arriba y ocupen un espacio mínimo en planta. Esto, convendrán conmigo, resolvería el tema de los aparcamientos, el ruido del tráfico, los accidentes,... por no hablar de los gases de la contaminación y resto de inconvenientes; el planeta, sin duda, lo agradecería.

Si ahora aparece en su salón su hijo dentro de 40 años y les cuenta todo esto, ¿qué pensaría usted?

Peor aún será que me diga que no, que añoraríamos el aire en la cara, el sacar la mano por la ventanilla, el ¿te gusta conducir? y todo eso. ¿Cree que alguien añora las diligencias, los coches de posta, el ir a pata a cualquier sitio, los viajes con las ventanillas bajadas y rugiendo todos de sed y calor? Pues ¿por qué cree que alguien añorará el tegustaconducir? Hace años le dije a un holandés que yo echaría de menos el cambiar de marchas, el controlar con el embrague. El holandés, con su coche automático a gas, me dijo: no. No lo echas de menos en absoluto. Y le creí. Y con esto nos pasará lo mismo. Cuando llegue, nuestros coches de ahora los veremos como las diligencias de John Ford.




David Gilmour - Wish you were here live unplugged

El fin de CiU




Artur "consejos vendo y para mí no tengo" Mas, por lo que parece, ha dado con el cómo seguir siendo el radical fanático en que se ha convertido, y atraer al mismo tiempo a los votantes.

Sí, porque su problema es que él se ha presentado con las siglas de CiU, coalición de dos partidos que él lidera: UDC y CDC, la cual además él también lidera. Y CiU, hasta su llegada al poder, se hay caracterizado siempre por ser un partido… ¿cómo lo diría?... equilibrado.  Catalanista, pero dentro de un orden. Amante del dinero como el que más, sí, pero respetuoso con las leyes, poco amigo de juergas y francachelas, y siempre con los pies en el suelo. Pidiendo más de lo que se quiere recibir, claro, pero sabiendo siempre qué rayas no debe pasar.

Y el problema que tiene CiU es que el viaje en el que se ha metido Artur "díme de qué presumes y te diré de qué careces" Mas es el opuesto a su línea de actuación tradicional: la ruptura, el enfrentamiento, la bronca,… y ningún sentido del ridículo que hace. Y el resultado es que algunos votantes tradicionales están desertando hacia otras siglas (quizá incluso hacia todas las demás) cuando no simplemente negando el voto, a la espera de que recuperen la cordura. Y da la impresión de que no están tampoco robando votos de otros caladeros. Así que, políticamente, la jugada le está saliendo al fenómeno como para pedirle que se tome un respiro.

¡Ah, pero creo que El Hombre ha descubierto qué falla! Falla, que está en coalición con UDC. UDC no es partidario del rumbo que el fenómeno ha fijado, así que hay algo que chirría en el mensaje: no puede presentarse como el gran líder radical y fanático y además ir de la mano de UDC, eso le quita credibilidad. Total, que el fenómeno piensa que lo que tiene que hacer es desligarse de UDC, presentarse como sólo CDC y así, pudiendo mostrarse tan radical y fanático como quiera, recuperará los votos que ha perdido y ganará los de otros partidos, gente que hasta ahora no estaba convencida de su radicalidad y fanatismo.

Es un crack. No, es el tío más mentecato que jamás hayamos conocido (ZP aparte, que es la mismísima definición del mentecato).

En fin, es igual. Veremos cómo le sale la jugada, si finalmente la juega. Mal, como todo lo que hace, pero veremos cuánto de mal.




Nada Fue Un Error - Coti & Julieta Venegas & Paulina Rubio