domingo, 28 de septiembre de 2014

La carga de nieve



¡Ah, la carga de nieve! Siempre mentada, siempre despreciada, casi siempre incomprendida.

Todo calculista sabe que es preceptivo tener en consideración la carga de nieve. Incluso en las situaciones en las que se descarte su aplicación, al menos se ha perdido un milisegundo en saber si se debía o no aplicar. Y, sin embargo, a aplicación que se hace es, en los más de los casos, errónea. Poco acertada, si me permiten decirlo así.

La carga de nieve se define en el Código Técnico de la Edificación; sí, ese afan legislador y regulador de todo no podía menos que regular también lo que se piensa de la nieve. Pasa que como casi toda la legislación de la época del inefable, está cargadita de incongruencias. ¡Y mira que era fácil!

En primer lugar, supongo que todo el mundo está enterado que cuando el CTE dice: 
Cuando la construcción esté protegida de la acción de viento, el valor de carga de nieve podrá reducirse en un 20%. Si se encuentra en un emplazamiento fuertemente expuesto, el valor deberá aumentarse en un 20%.
realmente debería decir lo contrario, que además es lo cierto. Fíjense, por ejemplo, en la foto que acompaño: hay una zona a resguardo del viento, y ahí se está acumulando. En las zonas expuestas, en cambio, la nieve ha desaparecido. Sí, el CTE en todo su esplendor.


Otra cosa que podría mejorar el CTE: termina con una tabla en la que dice, según la zona y la altitud, la carga de nieve básica. No dice nada, en cambio, de qué hacer si la altitud del emplazamiento no coincide con las tabuladas. ¿Se coge el límite inferior, el límite superior...? En realidad, se debe interpolar. Pero eso el CTE se lo calla. Lo que equivale a dejarlo a criterio del lector, y como el proyectista y el revisor tengan criterios diferentes, la hemos liado. Esta diferencia, en un punto a 1025 m en la zona 6 puede suponer contar 120 ó 200 kg/m2. Chapuceros, los hacedores de normas.

Por cierto, un consejo: asegúrense de que conocen la altitud del emplazamiento; no tiene porqué coincidir con la del ayuntamiento del lugar. Y no hablo especialmente de las zonas montañosas: en la misma ciudad de Barcelona, puerto de mar y todas esas cosas, yo he calculado cosas a 500 m de altitud. Basta con que estén en la cima del Tibidabo. Hay un barrio entero allí, y les aseguro que no nieva lo mismo que en el puerto. Y, por descontado, desde la cima hasta la base tenemos la panoplia entera de altitudes y edificaciones.

Pero donde en mi opinión se lucen los del CTE (y los de los EC, pero estos en general tienen un nivel superior) es a la hora de combinarla. La combinan como cualquier otra carga... ¡y se quedan tan anchos! ¿Usted lo ve normal? Según ellos, cuando la nieve es máxima, la acción térmica de dilatación debe contarla al 60%. Cuando la dilatación es máxima, la nieve estará al 50%. Cuando la nieve está al máximo, la acción térmica de contracción sólo estará al 60%. Nieve y contracción, se ve, son tan compatibles como nieve y dilatación.

También cuando la nieve sea máxima las sobrecargas de uso se reducen por alguna razón que se me escapa. En una cubierta, si es sólo para mantenimiento, no habría sobrecarga. Pero si la cubierta es una azotea, hay la del local desde el que se accede. Si, por ejemplo, es la terraza de un comedor laboral, el típico en el que ha contado 500 kg/m2 de sobrecarga de uso, cuando nieve, en el comedor sólo habrá 350 kg/m2, y otros tanto en la terraza (a añadir a la nieve). Si el edificio está en Sierra Nevada y usted ha contado 200 kg/m2 de nieve, casi 2 m de altura, ¿dónde están esos 350 kg de sobrecarga de uso? ¿Enterrados como idiotas? Y si el edificio es un comedor de una estación de esquí, ¿no es lógico suponer que cuando la nieve sea máxima la aglomeración también lo será?

Otro caso curioso es que el empuje del terreno y la nieve también se combinen con este criterio. Vaya, una vez tuve que intervenir en un caso en el que el terreno se congelaba y generaba un empuje que estaba rompiendo todos los tabiques interiores de las zonas próximas. Y en otros casos de este estilo, en los que nieve y empuje del terreno también iban al alimón.

Lo que quiero decir con esto es que la nieve es una acción especial, distinta a todas las demás, y se debe combinar con criterio. Con el criterio del calculista, que es el que conoce el proyecto; alguna recomendación del CTE puede venir bien, pero no más allá.

Es posible que el origen del problema radique en que los autores del CTE fueron (imagino) arquitectos del Ministerio de Vivienda, personas que en realidad están pensando en edificios civiles, los de las ciudades. Residenciales, hospitalarios, administrativos y similares. Y se dejaron millones de situaciones. Yo, que trabajo casi siempre en proyectos de ámbito industrial, me topo con muchas en las que aplicar el CTE es ridículo.

Por ejemplo, un sótano bajo una vía de circulación: si hay nieve no hay circulación. 

Y es que en los edificios "civiles", de forjados pesados, la carga de nieve es siempre ridícula, poco significativa. Contar 40 kg/m2 de nieve en una azotea de un edificio de 11 plantas supone minorar un 30% la sobrecarga de uso de 200 kg/m2 en las 11 plantas. ¿En qué va a ser más desfavorable? Al final, lo único que se consigue es complicar las combinaciones de hipótesis. Ya sé, me dirán que a la postre eso no importa, porque son los ordenadores los que se encargan de todo. Bueno, ya saben lo que opino yo sobre el tema.

Sin embargo, en una nave industrial la carga de nieve puede importar mucho. Las cubiertas suelen ser ligeras, y la sobrecarga de uso normalmente está localizada en una parte. Pero la nieve puede ser general, y con luces grandes puede suponer pesos importantes. Recuerden, por ejemplo, mi artículo sobre la nevadona del 2010. Si además proyecta naves adosadas a otras, no debe olvidar la consideración de la acumulación (por cierto, la CTE lo explica fatal). Y no la olvide, si usted proyecta una nave adosada a otra existente, comprobar este efecto en la existente. En la fábrica de la foto la nave más alta y que genera acumulación en una zona de la más baja se construyó después. Y, por supuesto, no hay ninguna relación entre sobrecarga de uso y nieve, generalmente la sobrecarga de uso se genera en la cara inferior de la cubierta, va colgada: en mi opinión, deben combinarse ambas al 100%.

En fin, si le ha interesado, repase la foto. Como curiosidad, verá aleros donde la nieve ha deslizado y otros en los que no; diferentes acabados, supongo. 

La nieve, es lo que tiene. Acostumbrados a que en los edificios civiles no tiene importancia, nos hemos acostumbrado a no dársela. Y los primeros de todos, los hacedores de normas. ¡País!, que diría Forges.


The Jesus and Mary Chain - Darklands

sábado, 27 de septiembre de 2014

NBA 2014-215: el pronóstico



Empieza la temporada de la NBA, las plantillas ya están confeccionadas,... es el momento de los pronósticos.

En primer lugar, hay que señalar que este curso y el siguiente son dos cursos de transición. Los dinosaurios de finales de los noventa, Duncan, Kobe, Nash, Garnett, Pierce, Allen, Nowitzki y compañía, se jubilarán por fin, y los de principios de los 2000, los que han mandado realmente en estos años, Lebron, Carmelo, Wade, Parker y demás, han pasado ya su plenitud  y empiezan a pesarles los años: en dos temporadas, los cachorros de este último draft, Parker, Wiggins, Randle, Doug, etc., habrán aprendido ya el oficio y, junto con lo poco bueno de los drafts anteriores, Davis, Lillard y alguno más, serán los que corten el bacalo. Pero hasta que eso ocurra, hasta que sepamos quiénes de ellos van a ser las auténticas superestrellas, la NBA va a tener un par de años libres, sin un dominador claro. Será pues una buena ocasión para aquellos equipos que estos últimos años ha hecho méritos para ganar el campeonato sin conseguirlo.

Dicho lo cual, esta temporada va a ser tan predecible como las anteriores: hay un puñado de equipos que aspira al título, en cada conferencia hay 10 equipos que podrían jugar los playoffs, y hay ya varios equipos que sólo aspiran a lograr 30 victorias.

Fijémonos, por ejemplo, en los Lakers de Los Angeles. Este año se van a arrastrar por las pistas y casi todos los equipos les tienen ganas, . El principal problema de este equipo es que la estrella va a ser Kobe Bryant. Kobe está ya acabado, aunque no lo sabe. pero el resto de su equipo (salvo Randle) es tan malo, que Kobe va a parecer buenísimo. Les van a dar pa'l pelo. El objetivo del equipo es que al terminar la temporada se vayan casi todos, y empezar a construir alrededor de Randle con tanto material nuevo como sea posible. Por cierto que también hay un montón de escoltas en la liga a los que Kobe les ha estado tocando las narices durante años y que ahora se las van a hacer pagar todas juntas. Ya lo verán.

Mirando las finales de conferencia, sólo hay dos equipos en el Este y tres en el Oeste que deben jugarlas; cualquier otro finalista será una sorpresa... y si pasa de ahí, mucho más.

En el Este, los finalistas están claros: el equipo de Lebron James y los Chicago Bulls. Al equipo de James no hace falta ponerle nombre, porque su equipo, en el Este, siempre será al menos finalista del Este. La clave será que además de ser el equipo de James, sean además un equipo de baloncesto. Si son Lebron y los Jamesitos, serán finalistas. Si son los Cleveland Cavaliers, irán a la Final.

Luego están los Chicago Bulls. Y no hay  nadie más en el Este, no creo que Washington lo consiga. Los Bulls son una incógnita. Derrick Rose se lesionará, probablemente, y Gasol se lesionará seguro. Sobre el papel, deberían arrasar; su recorrido dependerá de cuántos jugadores y quienes se presenten a jugar en los partidos clave.

En el Oeste, primero hay que hablar de Oklahoma City Thunders. Es un equipo que tiene un techo, que son las finales de conferencia. Un año las pasaron, pero no se volverá a repetir. El problema del equipo es su nombre: Oklahoma City. Nadie quiere ir a Oklahoma City; los mismos jugadores que sean de la zona habrán luchado muy duro para salir de allí. El resultado es que no tienen ningún cartel atractivo, y ningún buen jugador va a querer buscar casa en el corredor de los tornados. La única manera que tienen de fichar a gente buena es en el draft, y como ya son buenos... Además, Westbrook y Durant no se llevan bien. Es decir: a Durant, en que se le acabe su contrato, ya lo han visto. Y el equipo, al pozo una decenita de años.

Siguiendo en el Oeste, es obligatorio desde hace quince años mentar a los Spurs como favoritos. ¿Es que nunca se van a volver viejos? Sí, este año. Les va a salvar que la mediocridad campa por todos los pabellones y en comparación ellos parecerán mejores. Gasolina para un año tienen, y yo desde luego los tengo como mis favoritos para el título. Pero van a sudar tinta china.

Y mi tercer equipo en el Oeste es... Los Angeles Clippers. Es un equipo que, como dicen en los states, "ya ha pagado sus deudas". Quizá yo no sea parcial porque soy un fan de Griffin, pero estoy convencido de que este año se van a plantar en las finales.

Por lo demás, este año también los equipos del Oeste van a ser mucho mejores que los del Este, los partidos del Este van a ser un peñazo y los del Oeste a cara de perro, y tanto en la temporada regular como en las eliminatorias va a haber muchos más partidos de los necesarios. Y al final acabará cada uno puesto en su sitio.

Así es la NBA.

Ya puestos, les voy a poner una foto del que podría ser (dentro de unos años) el dominador de la liga. Lo acaba de fichar Michigan State, y se llama Matt McQuaid:


Efectivamente, es todavía un chaval. Pero como dice el viejo proverbio chino que hacía de cabecera en La Frontera Azul, "no desprecies a la serpiente por no tener cuernos. Quizá algún día se convierta en dragón".



Meat Loaf - Paradise by the Dashboard Light

jueves, 25 de septiembre de 2014

Las 10 mejores canciones de Disney

Las películas de Disney, todo el mundo ha visto al menos alguna, nos han dejado un puñado de canciones geniales. ¿Cómo elegir las mejores? Si hiciéramos una lista de "las 100 mejores canciones de Disney", seguro que nos dejábamos muchas fuera. 

Así que me he sentado a hacer mi propia lista y... era de esperar, me salen muchísimas. ¿Cómo no incluir las canciones de Baloo en El Libro de la Selva, el Hakuna Matata o el ¿Quién teme al Lobo Feroz?, por citar sólo algunas? ¿Y quién no ha cantado que Cruella de Vil es todo un espanto? Además, a partir de La Sirenita (1989), Disney descubrió que la banda sonora era tan importante o más que la película, y se dedicó a fondo: cuando la banda sonora le quedaba perfecta, la película arrasaba.

Vista la dificultad de la empresa, he decidido que incorporaría un segundo criterio: no han de ser de las más populares. El resultado ha sido un popurri de canciones excelentes, muchas de las cuales les habrán pasado desapercibidas al ver la película, aunque pienso que sin ellas las películas perderían muchísimo. Si tiene que hacer un trayecto largo en coche con críos, no lo dude. Y si es sin críos, también, qué caramba. Son canciones que nos gustarán a todos.

En fin, éstas son, en mi opinión, las diez mejores canciones de las películas de la Disney, ordenadas cronológicamente.

1) Dumbo (1941): Nunca ví a un elefante volar

 

2) Peter Pan (1953): Por donde tú vayas


 

3) Robin Hood (1973): Jamás en Nottingham



4) La Sirenita (1989): Bésala



 

5) La Bella y la Bestia (1991): Qué festín 



 6) Aladdin (1992): Principe Alí
 


7) Hércules (1997): La canción de Meg



8) Mulán (1998): Un hombre haré de ti
 


9) Tarzán (1999): Hijo de hombre

 

10) Hermano Oso (2004): Que sepa el mundo

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Licenciados en paro



Leo en el correo del lector de un periódico el lamento de un hombre de 39 años: "En mi caso soy un licenciado de 39 años, sin prestación por desempleo, en la rama de Historia, doctorado en Historia Contemporánea y con un sinfín de cursos. Pero lamentablemente con todo este currículum me encuentro en paro y con pocas perspectivas de encontrar empleo en este país". Ha enviado su C.V. a colegios, grandes empresas (cita Mercadona, entre otras), y bancos, y no le han respondido o le han dicho que los puestos que tienen no se ajustan a su perfil. Y se asombra: "Es difícil de comprender que un licenciado y doctorado de cualquier especialidad no se ajuste a ningún perfil de lo que buscan estas empresas o instituciones".

Por la dirección que adjunta, vive en un pueblo de la provincia de Córdoba, del cual la wikipedia nos informa sobre su demografía, geografía, historia, gobierno local, patrimonio artístico y monumental, cultura (con sus epígrafes de museos, gastronomía, fiestas y acontecimientos culturales, y Semana Santa), paisajes naturales, personajes ilustres, heráldica, centro de salud, educación y ciudades hermanadas. No dice nada de la economía del pueblo, por lo que no sé a qué se dedican allí o si tienen alguna industria local de relieve; colijo entonces que tiene las ocupaciones básicas de los pueblos de entre 10 y 15.000 habitantes. El museo, por cierto, es del vino y de la vid.

He aquí, pues, el drama.

Tenemos a un doctor en Historia de 39 años que no encuentra trabajo como historiador. Tampoco lo encuentra como profesor, entiendo que porque las plazas existentes ya están ocupadas, y que finalmente ha debido buscar empleo, supongo que como administrativo, en cuanta empresa tiene noticia. Pero estas empresas han debido de pensar, quizá, que todo un doctor en Historia se frustraría trabajando de administrativo, con toda la amargura que tal frustración conlleva, y que prefieren no tener un empleado frustrado y amargado. O quizás han sido los 39 años los que le han cerrado la puerta; puede también que tenga una familia (es de esperar, y como en su carta no se queja de no tenerla, digo yo que la tendrá y que la mujer sí trabajará), y que no esté dispuesto a buscar trabajo lejos de su pueblo.

Ante esta situación, todos los ingenieros nos preguntamos: ¿por qué estudió Historia? ¿Y por qué, al acabar, porfió en el tema y cursó el doctorado? Quiero decir, ¿qué pretendía? Seguramente empezó Historia hace 21 años, cuando él tenía 18. En 1996. En aquel año había una crisis espantosa, en Andalucía y en toda España. Era raro que un camarero no tuviera dos carreras y un máster y que un barrendero no dominara tres idiomas, no sé si me entienden. Y el mozo se metió a Historia. Con un par. Estudió lo que quería estudiar, está claro. Lo que ya no queda claro es si en ese momento le daba igual no trabajar en el futuro, si creía que iba a ser tan bueno que se lo rifarían o si creía que los licenciados (¡y doctores!) en Historia iban a estar buscadísimos. Pensara lo que pensara, la realidad es la que es y ahora el hombre tiene un problemón... que en parte se ha buscado él.

Abriendo un poco el objetivo, la historia de este señor es un ejemplo perfecto de una acusación que lleva ya años encima de la mesa: las universidades son fábricas de parados. Precisando más aún, las facultades de Humanidades de las universidades son fábricas de parados.¿Por qué, entonces, tenemos facultades de Humanidades? Bien, ya expliqué en otro artículo de hace años mi postura al respecto; en síntesis, pienso que deben existir, pero no tantas: la producción de, por ejemplo, historiadores, debe ajustarse a la demanda que de ellos hace la sociedad más la demanda de personas que quieren serlo únicamente por ocio, por afán de conocimiento. Es evidente que actualmente se licencian un número excesivo de historiadores (por seguir con el ejemplo), y esto, además de generar frustración en ellos, es un gasto económico que seguramente no nos podemos permitir. Y además, como pensaría un ingeniero, es una ineficiencia del sistema: destinamos a muchas personas de gran capacidad a, en el mejor de los casos, su infrautilización cuando no, como en el caso del señor de 39 años, su rendimiento nulo.

Aprovecho esta última conclusión para abrir más aún el objetivo. Un doctor universitario es una persona con una formación muy por encima de la media. Es, necesariamente, una persona tenaz, organizada, sacrificada, acostumbrada a pensar y a buscarse por sí misma las respuestas sin esperar a que otros se las den... Es una persona de gran valía. ¿Cómo es que no tiene aprovechamiento en la deprimida Andalucía? La verdad es que decimos "deprimida Andalucía" porque allí, mirándolo fríamente, hay más gente que trabajo. ¿Acaso los emprendedores son pocos y notan que la mayoría está esperando que alguien les cree los puestos de trabajo para aprovecharlos ellos? El drama andaluz lo es desde que tengo uso de razón, así que la pregunta que yo me hago es: ¿tiene arreglo, Andalucía?

En fin, ya ven que divago y divago, y termino desbarrando. Pero no sé qué tenemos que hacer con tantos historiadores, geógrafos, especialistas en literatura francesa del siglo XVII, graduados en biblioteconomía, con tantos y tantos estudiantes que eligen carreras con pocas salidas, poca demanda.

Por cierto, una última idea, aunque admito que no viene a cuento: En mi opinión, la enseñanza preuniversitaria debería estar plenamente enfocada a las humanidades; las ciencias, una primera aproximación es suficiente. ¿Necesitan todas las personas sólidos conocimientos de trigonometría, saber sacar derivadas e integrar o la regla de Cramer para resolver sistemas de tres ecuaciones, por citar sólo unos ejemplos?  Nuestro sistema educativo machaca a los niños malenseñándoles Matemáticas (porque las enseñan mal), Fïsica o Química, y se olvida de instruirles de verdad en Arte, Literatura o Historia. Porque es mucho más importante que todos sepamos (¡y amemos!) "Humanidades", más que el que todos sepamos (de hecho, la gran mayoría olvida y acaba detestando) "Ciencias".

El caso es que hay muchos licenciados en Historia que están trabajando en lo que les ha salido, nada que ver con lo que creían que trabajarían. O que no están trabajando, simplemente. Y esto es real. Y es algo sobre lo que hay que reflexionar.



Simon & Garkunkel - Bridge over troubled waters

martes, 16 de septiembre de 2014

Una interesante entrevista a José María Mena



El otro día, el periódico virtual eldiario.es publicó una interesante entrevista a José María Mena (para leerla, pinche aquí). José María Mena, no sé si sabrán, fue uno de los fiscales que intentaron llevar a juicio a Jordi Pujol por el asuntillo aquél de Banca Catalana. Asuntillo que tampoco sé si sabrán que consistió en el saqueo de un banco y... miren, no se lo cuento porque me faltan palabras; si quieren, en la red tendrán excelentes descripciones de lo que fue aquello. Pero antes, revisen su tensión arterial.

La entrevista, sí, la entrevista. La entrevista a Mena, si la han leído ya se habrán dado cuenta, no tiene desperdicio. Da qué pensar, ¿verdad?

Con todo, una idea quería resaltarles. Sostiene Mena que él cree que si les hubieran dejado, si el poder político no hubiera parado la acción de la Justicia, otro gallo nos habría cantado desde entonces. Porque el mensaje que se transmitió a los políticos fue que podían delinquir, que luego la casta ya se encargaría de que la Justicia no se metiese. Si en cambio se hubiese dejado claro que la Justicia vigilaría y castigaría a los políticos si éstos hicieran de las suyas...

No sé si tendrá razón. Pero sí sé que habría que haberles dejado intentarlo.



Los Elegantes - Mangas Cortas

domingo, 14 de septiembre de 2014

El origen de un mundo nuevo



"El otro día" escribí un artículo sobre las matrículas en España; mi intención, entonces, era continuarlo con éste, pero... demasiado calor, algunos achaques,... lo cierto es que he estado "inapetente", y no he escrito nada. Como opino que esto no es bueno, vuelvo a sentarme, a ver si consigo rematar lo que hace un mes quería contarles.

Imaginen, pues, que hoy es 23 de agosto.


Hoy, 23 de agosto, sería el cumpleaños de Georges Cuvier. Cumpliría 245 años, porque nació en 1769. Lo menciono, porque Cuvier es uno de esos personajes que nos han hecho avanzar con su raciocinio pionero; reconozco que no es uno de los grandes prohombres de la Humanidad, pero tampoco se merece el olvido en el que se le tiene. En mi opinión, creo que las escuelas podrían renunciar a unos bites de todos los diversos conocimientos que inculcan a los infantes para hablarles, siquyiera diez minutos, de CUvier, lo que hizo y lo que supuso. Bien mirado, este hombre nos abrió las puertas a un mundo nuevo.

Por partes. En primer lugar, una imagen:
By Ghedoghedo (Own work) [CC-BY-SA-3.0 (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0)], via Wikimedia Commons
Cuvier, lo habrán adivinado, era francés, de Montbéliard. En aquella época estaba de moda Buffon (otro personaje que merece entrada, veremos si algún día cae), y Cuvier queda fascinado por el campo de la Historia Natural, y rápidamente destaca por sus méritos y lo fichan como profesor de anatomía en el Museo de Historia Natural de París, en 1795 (no todo era el Terror, por lo que se ve; aunque en aquellos años el tema de todas las conversaciones en todo París fuera la política, está claro que la vida continuaba). Ejerciendo su nuevo puesto, se dedica a observar y clasificar todas los animales y plantas que encuentra.

Un buen día (es un decir, puede que lloviera), en la colina de Montmartre, se topa con unos fragmentos de huesos sueltos... que no reconocen. Pero Cuvier es un genio, los reúne, dibuja las partes que faltan reconstruye así el esqueleto de un animal completo al que le pone el nombre de "Paleotherium" (animal viejo). Ese animal sería más o menos así:
Recreación similar a un Tapir de 1905
Palaeotherium by Joseph Smit (1836-1929) from Nebula to Man 1905 England
Inicialmente se creyó que era un bicho parecido a un tapir; actualmente se cree que se asemejaba más a los caballos. El casoi es que el animalito rondaba por París hace unos cincuenta millones de años.

Es de imaginar que el joven Cuvier tendría difícil, en aquella época, convencer a los sabios de que esos huesos que había encontrado eran parte de un animal desconocido que tenía esa pinta, pero mas tarde se descubrieron esqueletos completos totalmente semejantes al que había descrito / predicho Cuvier. Como los de la primera imagen que he puesto.

Bien, bravo por el joven Cuvier, muy meritorio todo, pero el avance no está en descubrir el nuevo animal (que también). Lo tremendo es... el paso de fragmentos de huesos sueltos a un esqueleto y a una silueta del animal. ¿Cómo lo ha hecho? ¡Ah!, ésa es la clave.

A partir de ahí, los principios seguidos por Cuvier se aplican a porrones de huesos extraños que se habían encontrado en todas partes y se reconstruyen los esqueletos enteros de toda case de animales prehistóricos. Nace la Paleontología.

Por cierto, que tocaba explicar qué había sido del Paleotherium y porqué ya no quedaban. Cuvier estudia esos "yacimientos" con geólogos, e inventan la estratigrafía, una disciplina de la geología que se basa en el estudio de los estratos. Estudiando los estratos, Cuvier observa que los fósiles se encuentran también estratificados, y llega a la conclusión de que existe una secuencia temporal para todo esto, con extinción de especies viejas y aparición de nuevas. Sólo queda ponerle la guinda al pastel: Doctor, ¿de cuántos años etamos hablando, exactamente? Aquí es donde el genio mete la pata: cree en el catastrofismo: la historia de la Tierra es una sucesión de catástrofes, las cuales extinguen a unas especies y aparecen otras. Así que no hace falta muchos años: digamos unos 6.000, más o menos. Era la escuela francesa, de naturalistas, opuesta a la inglesa de geólogos, que optaban por el gradualismo: cambios muy lentos. Pero, llegados a este punto, creo que no dejaré en muy buen lugar a Cuvier, a fin de cuentas un hijo de su tiempo, así que prefiero terminar aquí.




Joan Manuel Serrat - Mediterráneo