martes, 4 de diciembre de 2012

A veces no importa lo que digan las normas


Dice nuestra norma de hormigón EHE-08, sobre los cálices de cimentación de los pilares prefabricados:
59.1.4 Cálices
59.1.4.1 Generalidades
Los cálices deben ser capaces de transferir los esfuerzos axiles, cortantes y momentos flectores del pilar a la cimentación.
59.1.4.2 Cálices con llaves en su superficie
Aquellos cálices que presentan llaves pueden considerarse que actúan monolíticamente con el pilar.
En caso que las llaves sean capaces de resistir la transferencia de tensiones tangenciales entre el pilar y la cimentación, la comprobación a punzonamiento se realizará de igual manera que si el pilar y la cimentación fueran monolitícos, de acuerdo con el Artículo 46° y tal como se presenta en la figura 59.1.4.2.
59.1.4.3 Cálices con superficies lisas
...
Antes de esta norma no había, que yo supiera, una norma que estudiara la cimentación de los pilares prefabricados; era, por lo tanto, algo que se hacía al buen saber y entender del técnico, el cual además discutía sus criterios con todos los interesados que se los cuestionaran, y de estas discusiones aprendían todos (estoy seguro, al menos aprendía yo).
Dado que no había norma, yo echo un poco en falta que la primera que los estudie dedique al menos una línea a decir lo que es un cáliz y lo que es una llave. Pero bueno, esto ya es un capricho personal.
Dice la norma que si el cáliz presenta llaves se puede considerar que es una unión monolítica (y por lo tanto el conjunto se analiza como una cimentación tradicional).

Y dice también que, a efectos de analizar el punzonamiento, puede cuestionarse si la llave es capaz de unir el pilar y el cimiento.

En fin. Hombre, es bueno que la norma legisle un poco sobre este asunto, pero ¡que legisle bien! Hasta ahora, las cosas se resolvían por cauces razonables: un técnico aportaba una solución basada en su criterio, y si se está en desacuerdo se discutía. Siempre con conocimiento de causa y con amplitud de miras. Pero en el instante en que la norma se pronuncia… ¡Amigos! A partir de ahora, para discutir ya no se requerirá saber sobre los cálices: sólo saber la norma. La discusión cambia a si cumple la norma o no. Y en el momento en que el foco ya no está en si la solución es buena o no, la razón salta por la ventana y la intolerancia se adueña de la mesa. Que, en estas cosas, los ingenieros y los calculistas somos capaces de lo mejor y de lo peor.

Doy por sentado que cualquiera entenderá que, además del cáliz, también el pilar tiene que presentar llaves, ¿no? La norma no lo dice, pero imagino que a ningún constructor de prefabricados se le ocurrirá plantarse en la obra sin llaves en los pilares. Aunque me temo que es cuestión de darle tiempo al tiempo; pero de momento, contemos que esto no va a ocurrir.

Pero… caso real. Obra ejecutada. Estudiamos una ampliación. Se analizan los pilares prefabricados y su unión con la cimentación. Sí, los pilares llevan llaves y en los cálices se pusieron llaves. Genial. Er… cuidado, un momento. Actualmente hay 1.300 toneladas de carga en el pilar. ¿Pueden las llaves de la cimentación transmitir 1.300 toneladas? Estudiemos la llave: ni de chiste. En el mejor de los casos, pueden coger unas 80 toneladas. Si la cimentación es monolítica, el encepado es válido. Si se ha de considerar el cáliz, el encepado ya se está comiendo sus márgenes de seguridad. ¿Aplicamos la norma o el sentido común? ¿Le digo a mi cliente que su primer proyectista se equivocó, y que se olvide de ampliar y que además su edificio está en precario?

No es fácil calcular una llave cáliz-pilar. La norma, por supuesto, no dice nada de cómo se hace, con lo que quien quiera comprobarlo deberá, como mínimo, tener las ideas claras y saber del detalle. Dos cosas que cada vez abundan menos en este gremio. Porque ¿para qué? ¿No dice la norma que si hay llaves el cáliz pasa a ser una unión monolítica y nos olvidemos? ¡Alegría!

En este punto en concreto, está claro que la norma es mejorable. Un redactado tipo "Aquellos cálices que presentan llaves que sean capaces de resistir la transferencia de tensiones tangenciales entre el pilar y la cimentación pueden considerarse que actúan monolíticamente con el pilar", por ejemplo, me parece a mí mucho más sabio que la desangelada frase actual. Pero es que objeciones como ésta se pueden hacer en más puntos de la norma y a muchas más normas. Y, claro, cuando uno está calculando y se topa con un aspecto de la norma que cree que va contra el sentido común… pues debe aplicar el sentido común. En su proyecto o dirección técnica refleja su discrepancia y su criterio, y a mí me parece muy bien.

Lo que pasa es que, a menudo, nos topamos con personas que opinan lo contrario: la Norma debe prevalecer frente al sentido común. Si estamos en una fase de revisión, conmigo, ya la hemos liado.

Claro que peor es cuando nos topamos con personas que, directamente, desconocen el porqué de la norma; la aplican y punto. Y sin que otro (con sentido común) revise su trabajo. Y acabamos con casos como el de mi cliente. Que ya es tarde para discutir.



Por cosas como ésta, los técnicos tienen que seguir sabiendo, aunque los ordenadores hagan todo el trabajo. Porque el sentido común sólo lo tienen las personas, y a veces no importa lo que digan las normas.

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