sábado, 7 de noviembre de 2020

Estudiar Ingeniería hoy

https://www.youtube.com/watch?v=jsKqR--oUno



Un año más, las notas de corte de muchas ingenierías son las más bajas. Es cierto que Ingeniería en vehículos aeroespaciales tiene un 11,658 como nota mínima, pero eso tiene truco: ofertan 60 plazas. Si ofertaran 390, como en Enfermería, estoy seguro de que con un 5 se entraría: no es fácil encontrar por estos pagos 390 estudiantes que quieran dedicar su vida a diseñar vehículos aeroespaciales. Para estudiar una ingeniería de tecnologías industriales no hace falta un 10, y tal y como están diseñadas las PAU actualmente, para no obtener un 10 hay que ser bastante paquete. Bueno, pues hay paquetes estudiando ingenierías. Ingeniería de sistemas de telecomunicación sólo oferta 20 plazas, y aun así han entrado alumnos con un 8,936. Ingeniería civil en la UPC, 8,626. Ingeniería mecánica en la UPC, 225 plazas, un 7,556. Electrónica de telecomunicaciones en la UAB, 20 plazas, 6,31. Diseño industrial en la UPC, 100 plazas, 5,566. En la UAB piden un 5. Vamos, que me los imagino repartiendo flyers cerca de las discotecas y los profesores animando a la gente que pasa por la calle a entrar y matricularse. Ingeniería geológica y ambiental en la UPC, 5. Tecnologías industriales en la UPC, 5. Obras públicas en la UPC, 5. La lista es enorme. Si usted no se empeña en diseñar el rover de Marte, puede estudiar ingeniería.

Parece ser que, como siempre, hay pocas chicas. Claro que uno podría decir que tampoco hay muchos chicos, así que no hay que rasgarse las vestiduras: podría razonarse que las ingenierías son para pringados y que las chicas se las apañan para no acabar ahí.

Por otro lado, las ingenierías arrastran un sambenito de ser carreras duras. Es obvio que si se matriculan paquetes, la tasa de suspensos será mucho más alta que en medicina, a la que sólo llegan los mejores de cada curso.

Todo esto, claro está, no me llena de orgullo y satisfacción. Preferiría que hubiera tortas para entrar, pero no en la diseño de rovers en Marte. Que, dicho sea de paso, es posible que sea una necesidad en el futuro, pongamos dentro de 40 años, pero hoy en día... no sería la especialidad que aconsejase. No, me gustaría que la pugna fuera en las ingenierías básicas, las troncales. Lo curioso es que esto ocurre en algunos sitios. La ingeniería mecánica que pide un 5 en la UPC pide un 10,82 en Valencia. Pero son pocos los casos, muchos de ellos con dobles titulaciones (esto no lo he terminado muy bien de entender, puede que sea demasiado antiguo: no sé para qué quiere un ingeniero tener además una titulación en matemáticas o en física).

No sé porqué es. Quizá, porque la gente sepa el dinero que ganamos los ingenieros. Bromas aparte, yo creo que es un problema que atañe a todo el país. Que sus chicos no quieran ser ingenieros.

Es posible que la culpa sea porque en realidad el pueblo llano no sabe bien qué hacen los ingenieros. Y no basta con decirles que somos los que tomamos las decisiones inteligentes en este país. Yo mismo, calculista de estructuras. Cuando digo que soy calculista siempre veo una cara de extrañeza. ¿Y qué calculo?, me preguntan. Estructuras, respondo sabiendo que la cara va a cambiar a ignorancia completa. ¿Eso qué es? La gente no sabe lo que es una estructura. Lo explico, y las siguientes preguntas son si eso se calcula, y si eso no es cosa de arquitectos. Pues imagínense ustedes explicar la misión de un ingeniero en una fábrica. Normal que los chicos no quieran ser ingenieros. En sus vidas hay médicos, enfermeros y farmacéuticos. Maestros, filologos y profesores de química, física o matemáticas. Les enseñan informática, ven a los políticos y saben del trabajo de los periodistas y los arquitectos. Saben de los cocineros de élite y de las escuelas de cocina. Pero no aprecian el trabajo de los ingenieros. Teclean, pero no se paran a pensar cómo se fabrica un teclado, una pantalla o un ordenador. La silla en la que están sentados y la mesa que tienen delante. La ropa que visten o cómo se consigue llenar una despensa. No, son cosas que se dan por... Que ni se dan. Que ni se plantean. Y vale que es lógico, no podemos saber de todo ni nuestro cerebro puede estar constantemente planteándose las preguntas de lo que no sabe, pero no estaría de más que en algún momento en las escuelas los maestros les hicieran reflexionar a los chicos y les dijeran: nosotros no sabemos cómo se hacen las cosas, los ingenieros sí.




Amalia Mendoza - Échame a mí la culpa